Una dirección financiera compartida

Desde mi experiencia en la dirección de la sociedad GICOOP, dedicada a la financiación de cooperativas mediante préstamos y títulos participativos, existe una necesidad de las empresas que la mayoría de ellas no percibe, pero que a ojos de una entidad financiera es perentoria, una dirección financiera estable.

Es una necesidad general de las pequeñas empresas relacionada con la mayor complejidad derivada del propio desarrollo empresarial y del entorno, y no está relacionada con la fórmula societaria.

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Nos hemos encontrado con empresas que apenas llevan ningún control de la tesorería. Otra ha imputado como gasto la compra de maquinaria. En otra se modifican los criterios de amortización a conveniencia o se contabilizan a precio de coste como existencias productos obsoletos.

Y cuando las empresas han de presentar una solicitud de nueva financiación que exige un dossier financiero con las proyecciones de balance, cuentas de resultados y flujo de caja la cosa se soluciona acudiendo, en el mejor de los casos, a un consultor para que nos ayude.

En este último ejemplo real, lo que suele ocurrir es que la empresa no asume el plan de negocio o dossier financiero como propio, como un instrumento útil de trabajo, sino únicamente como un requisito formal para acceder a la financiación.

Todas las situaciones anteriores quedarían resueltas con la existencia de una dirección financiera estable.

¿Cómo hacer que las empresas visualicen esta necesidad? ¿Y cómo hacer que reconozcan el valor de su trabajo? ?Qué características debe tener?

Para las pequeñas empresas no es justificable tener una dirección financiera (o comercial) a tiempo completo, eso está claro.

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Pero, ¿Y si compartimos la dirección financiera? Una dedicación media de un dia a la semana de una dirección financiera experta es suficiente para la mayoría de las pequeñas empresas y su coste se comparte con otras y todas se benefician.
En el caso de las cooperativas las entidades representativas podrían poner en marcha programas de impulso de este tipo de soluciones estables. Algunas empresas como Sambucus, Delícies del Bergadà, El Rosal y Espigoladors han empezado a compartir un comercial. Nos muestran el camino